Qué le pasa al cerebro durante la depresión…
Durante mucho tiempo yo tuve la idea de que depresión le ocurría a las personas pesimistas, o que agrandaban mucho un problema. Otro concepto que tenía es que uno de los hemisferios del cerebro no se comunicaba con el otro, pero nunca indagué con profundidad qué ocurría, hasta que padecí de depresión y a pesar de que quería salir de ella, me di cuenta que no era tan simple como recuperarse de una gripe.
El problema va más allá de irse al sacerdote a confesarse, olvidar el problema, esconderse o asumir que la vida es triste y que hay que vivir así... no, hay que buscar ayuda.
En la imagen se puede ver con claridad la actividad cerebral, y cómo se ve un cerebro deprimido en relación a otro normal.
Cuando atravesamos un periodo de mucho estrés o mucha tristeza o mucha presión y ansiedad, nuestro tipo de pensamiento genera una reacción en el cerebro y una respuesta química en nuestro cuerpo, en donde emitimos diferentes tipos de hormonas como la adrenalina, la noradrenalina y el cortisol, que afectan a nuestro sistema inmunológico.
Las dos primeras hormonas que mencioné arriba son también neurotransmisores en el cerebro llamados epinefrina (adrenalina) y norepinefrina (norepinefrina). Ambos reflejan nuestro nivel de estrés o tristeza en el cerebro.
Cada una de nuestras células cerebrales llamadas neuronas se comunican a través de un estímulo químico o eléctrico que se llama sinapsis. Cada una de esas neuronas tienen dendritas, o sea pequeñas extensiones como las ramas de un árbol por donde se efectúa el estímulo químico o eléctrico. Pero ante la falta de neurotransmisores esas dendritas de las neuronas comienzan a secarse y la sinapsis no ocurre, el cerebro queda más y más incomunicado.
Es aquí en donde no tomas las decisiones correctas, pierdes tu capacidad de autogestión, pierdes apetito, te aislas porque dejas de sentir emociones, tu cerebro se va desactivando.
La sinapsis química es la más común, que es la que utiliza neurotransmisores y para que ese sistema funcione bien, requiere de neurotransmisores positivos (+) como la dopamina, la serotonina, las endorfinas, la oxitocina y otros más. Sin embargo durante un periodo de tristeza, estrés o abatimiento prolongados, dejamos de producir los neurotransmisores positivos y aumentamos los negativos como la epinefrina, nuestra situación así empeora no sólo emocional sino físicamente también.
Eso es depresión, requiere tiempo, paciencia y un cambio emocional y de nuestra perspectiva de la situación que consideramos amenazante para que ese mecanismo sea revertido.
El proceso de recuperación es lento y puede tomar en algunos casos 2 años o más para recuperarse por completo, con medicación, tratamiento sicológico o buena vida espiritual, depende de qué funcione mejor para ti, pero tiene cura.
Muchas veces es bueno esperar a que el tiempo repare nuestras heridas, sobre todo si la depresión se debe a la pérdida de un ser amado como la muerte, el rompimiento de una relación muy valiosa para nosotros o una enfermedad que deteriora a la persona que amamos, sin embargo, si es necesario hay que seguir un tratamiento inmediato como cuando sufres de un trauma o te expones a un alto grado de estrés.
Cuando veas una persona con depresión ofrécele tu tiempo, tu alegría, tu esperanza, tu atención, tu cuidado. Si es un colega de trabajo, ayúdalo, invítalo a comer contigo, dale esperanzas y cariño. El amor y la compasión son las mejores píldoras para el espíritu y tienen un efecto positivo porque también genera un cambio químico en nuestro organismo y cerebro.
Si eres un familiar ayuda a tu ser querido a ir al doctor y a tomar medicación, los antidepresivos ayudan para que las dendritas se regeneren en el cerebro gracias a la serotonina que contienen estos medicamentos, que contribuye a la vez a balancear a los otros neurotransmisores positivos. También llévalo a ayuda psicológica o espiritual si profesa una fe para revertir su visión sobre la situación que lo ha enfermado.
Mi cerebro se veia bien apagado en el 2014, cuando estuve muy enferma pero hoy he vuelto a trabajar, escribo y leo buenos libros, tengo una vida plena con más amigos y un cerebro completamente regenerado y puedo ayudar a otros. Siento que soy una mejor versión como persona.
Como ha dicho el famoso científico inglés Stephen Howking - quien ha estudiado por décadas a los agujeros negros de la galaxia desarrollando la teoria de que son la entrada a otros universos - al preguntarle sobre depresión contestó lo siguiente «Quiero decir que los agujeros negros no son tan negros como todo el mundo cree que son. No son cárceles eternas, como lo creían antes. Tienen una salida y, tal vez, incluso llevan a algún otro universo. Si te sientes como si estuvieras atrapado en un agujero negro, no te desesperes, pues existe una salida».